Portada  |  14 agosto 2020

¿Quién es Fernando Polack? “El doctor esperanza” – Biografías

En este quinto capítulo de Biografías, el hombre detrás de una de las vacunas que se están desarrollando en el país, esperanza contra la pandemia en Latinoaemérica. Es Fernando Polack.

Biografías | Personalidades de la pandemia

Los que lo conocieron en el club Hacoaj durante su adolescencia en los ’80 aseguran que Fernando Polack era -y todavía es- un gran número 9. Fue alumno del Colegio Nacional de Buenos Aires y, dicen sus más cercanos, que a nadie le sorprende el lugar a donde llegó: es uno de los protagonistas en la lucha contra la pandemia del coronavirus.

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A pesar de que a Fernando le gustaban la literatura, la sociología, la filosofía y la historia, no pudo contra una pasión heredada; la medicina. Su papá era médico y su mamá odontóloga. Ella solía decirle: “Todo lo material te lo pueden sacar, lo único que podés proteger es lo que tenés en tu cabeza”. Fernando pareció tomarlo al pie de la letra.

Se graduó con honores en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires en 1990. Fue Residente de Pediatría en el Hospital Francés de Buenos Aires y continuó su formación profesional en los Estados Unidos, donde fue Residente de Pediatría en el William Beaumont Hospital en Michigan y Fellow Post-Doctoral en la División de Infectología Pediátrica de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore, Maryland. 

Allá recibió el premio a mejor investigador joven en Pediatría de los Estados Unidos y el reconocimiento a la excelencia en investigación pediátrica por parte de la Sociedad de Investigación Pediátrica norteamericana. Actualmente sigue siendo profesor de Pediatría en la Vanderbilt University. 

 En 2002 decidió regresar a la Argentina, pero mantuvo sus cargos en EEUU. Volvió en plena “fuga de cerebros”. Tras la crisis que tuvo su clímax en diciembre de 2001, muchos científicos eligieron apostaron a un futuro en el exterior, llevarse su capital intelectual y profesional a otros países. Pero él se quedó. 

 En 2003 creó la Fundación INFANT, con sede en el barrio porteño de Flores. Es una organización sin fines de lucro, cuyo objetivo inicial fue estudiar virus respiratorios infantiles (causantes de la bronquiolitis y la gripe) y el asma, así como también el dengue, a fin de contribuir en el desarrollo de una vacuna.

Él y su equipo lograron explicar por qué la gripe H1N1 enfermó gravemente y mató a jóvenes sanos, abriendo el camino para la creación de una vacuna segura y eficaz.  La fundación recibió apoyo de la Fundación de Bill y Melinda Gates. Su trabajo sobre enfermedades respiratorias en niños se convirtió en referencia mundial. 

Era mediados de mayo y la pandemia una realidad ya tangible en la calle, cuando Polack lanzó un proyecto de investigación sobre plasma. Se presentó un día en la Quinta de Olivos, junto a su equipo y representantes del laboratorio Pfizer. Anunció que el país sería parte del reducido grupo de países donde se probaría uno de los proyectos de vacunas más avanzados contra la enfermedad. 

Desde el viernes 31 de julio, el Dr Polack participa de un convenio de cooperación mutua con el Hospital Militar y laboratorios Pfizer para evaluar la eficacia de la vacuna contra el coronavirus en voluntarios sanos.  Hoy, en un país donde la cantidad de muertos en un día iguala la cifra que al principio de la pandemia se necesitaban dos meses para alcanzar, él es el hombre detrás de la que podría ser la próxima vacuna; el  doctor de la esperanza.

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