Conseguir algunos productos en el Delta puede volverse un poco complicado, pero gracias a los barcos almacén, eso tiene solución.
Estos barcos recorren la isla dos días a la semana, proveen a los isleños de todo tipo de productos, desde carne y verdura, hasta productos de limpieza, pasando por golosinas, comidas para las mascotas y hasta whisky.
Si algún vecino tiene algún pedido especial, como algún medicamento, artefactos para el hogar o algún repuesto, los comerciantes lo compran en tierra y se lo alcanzan a la isla.
Hay 5 barcos almacén que recorren el delta, cada uno trabaja un día distinto para que los vecinos tengan opciones y todos puedan vender.
La mayoría de las veces, los barcos almacén vienen de herencias familiares, personas que recorrieron el Delta de pequeños y hoy continúan la tradición con algún hijo.
Los precios de los barcos almacén no son muy distintos a los de los supermercados, sin embargo, hace 10 años, sí lo eran. Hoy en día la competencia solo está en las ofertas que los mercados de tierra pueden ofrecerles a los clientes.
Cuando lo vecinos necesitan comprarle al barco almacén, colocan una bolsa en el muelle para que el comerciante sepa que tiene que frenar para una venta, aunque hoy en día, los clientes también le avisan por WhatsApp.
Otros isleños se acercan al barco almacén en sus propias lanchas y hacen la compra de embarcación en embarcación.
Más allá de los barcos, también existen las lanchas almacén que tienen menos productos y son un 20% más caras, pero pasan todos los días de la semana.
Con las lanchas y los barcos, son aproximadamente quince las embarcaciones que se dedican al comercio dentro del Delta.
Lesa, desde el Delta en una nueva crónica urbana.
Comentarios