El acceso gratuito a la llamada "canasta menstrual" viene siendo un reclamo de las organizaciones de mujeres. Ya con media sanción de la Cámara de Diputados, Santa Fe está a un paso -senadores de por medio- de contar con un programa provincial de distribución gratuita e irrestricta de los productos de gestión mensual.
Desde copas menstruales, toallas ecológicas de tela, esponjas marinas y ropa interior absorbente hasta toallas descartables industriales y tampones, serían entregados a través de centros de salud y hospitales, escuelas y otros ámbitos educativos, refugios a cargo de la provincia, y en las cárceles para quienes estén privadas de su libertad, informan los colegas del diario La Capital.
Garantizar el acceso a estos insumos no sólo busca saldar la desigualdad entre las mujeres que pueden acceder a ellos, sino además la brecha de género que persiste. Por eso, desde 2017 y con el lanzamiento de la campaña, el espacio Economía Feminista lleva adelante un registro mensual de los costos a los que tienen que hacer frente las mujeres y transgénero.
Mujeres y personas transgénero pasan más de 2.500 días de su vida, casi el equivalente a siete años, menstruando, y el costo de los insumos que utilizan, desde tampones y toallas higiénicas hasta copas menstruales, les cuestan cada mes una suma cercana a los 310 pesos, y más de 3.700 al año. Un número que desde 2017 a esta parte se incrementó más de un 130 por ciento.
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