Tras el hallazgo de una boa constrictora debajo del Puente Colgante de Santa Fe, Marcela Titarelli, quien es licenciada en biodiversidad del área técnica profesional de la Granja La Esmeralda, brindó precisiones sobre sus características.
“Como todo animal de nuestra fauna local y fauna silvestre, siempre hay que evitar el contacto y no acercarse para no molestarlos sobre todo y para evitar accidentes y esa es la recomendación que siempre damos gente desde la provincia básicamente. Este ejemplar está incluido dentro de un grupo especial de serpientes que se conocen como boas donde llegan a tener tamaños muy grandes. Esta especie es la más grande de la Argentina que puede llegar a medir hasta 4 metros o un poco más y pesar más o menos 30 kilos", describió la profesional.
“Como es especialista en ambientes acuáticos esta especie -también conocida como Anaconda Amarilla o "Curú tijú", entonces de alguna manera es común verla en algunos lugares y en otros no tanto, pero lo cierto es que es especialista en ambientes acuáticos y como nosotros estamos en un área de transición, es probable encontrarnos con algunos ejemplares, sumado a que la bajante de los ríos, del Paraná sobre todo obviamente, hace que por ahí muchos animales busquen otros ambientes, otros cuerpos de agua y se desplazan”, acotó Titarelli.
También destacó cómo se alimenta: “Es un depredador importante en las redes tróficas y de todos los ambientes acuáticos. Se alimenta de anfibios, es decir de algunos sapos, ranas, de peces y en cuanto a las aves, se puede alimentar por ejemplo de algunas de la región como ejemplo en las garzas. Y en lo que respeta a mamíferos, como hay muchos animales como coipos, por ejemplo en la zona o carpinchos, bueno esas son sus víctimas principales”.
Por último, la especialista puso énfasis en las medidas que debemos tomar si nos encontramos con un ejemplar de esta especie o de cualquier otra. “En primera instancia es no intervenir. Primero que nada recordar que la fauna silvestre está protegida por ley, así que está prohibida absolutamente su captura o la caza o la comercialización. Eso por un lado, por el otro, evitar molestarlo así que evitarse y demás para no crear ningún tipo de accidente sobre todo con los humanos, y comunicarse con la fuerza de seguridad, como el 911 que enseguida deriva a quien corresponda”.
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